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    antecedentes de cáncer de mama
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    • 2 de marzo de 2022

    Una historia de cáncer de mama

    La forma femenina ha inspirado culto, reverencia y adoración en muchas culturas diferentes desde el principio de los tiempos. El cuerpo de la mujer, y en particular sus senos, han simbolizado tradicionalmente la fertilidad, el nacimiento, la vida y el amor. Es tristemente irónico, entonces, que esas mismas partes del cuerpo también estén vinculadas a la devastadora enfermedad que históricamente ha afectado a cientos de miles de mujeres. Hoy echamos un vistazo a la historia del cáncer de mama con la esperanza de comprender esta aflicción complicada y peligrosa.

    La evidencia de la conciencia humana sobre el cáncer de mama se remonta al antiguo Egipto y Grecia. Los comentarios descubiertos de esos períodos sugieren que las personas reconocían los síntomas, pero no tenían muchas soluciones aparte de la oración y las ofrendas de sacrificio a las deidades.  

    Ya en el primer siglo, los curanderos y médicos comenzaron a encontrar tumores en todo el cuerpo y comenzaron a experimentar con prácticas de extirpación quirúrgica. Sin embargo, este progreso exploratorio médico se desaceleró en la civilización occidental durante la Edad Media, cuando fuertes influencias religiosas entraron en conflicto con la posibilidad de un avance científico.   

    Afortunadamente, la Era del Renacimiento revivió el interés y la tolerancia por la ciencia, y la cirugía se convirtió una vez más en la fuerza impulsora detrás de la exploración del cáncer. Durante el siglo XVIII, el trabajo del cirujano progresista John Hunter condujo al descubrimiento del vínculo entre la linfa, los glóbulos blancos y el cáncer de mama. Sin embargo, la causa del cáncer de mama siguió eludiendo a los científicos hasta que se encontraron métodos de detección más precisos.

    El siglo XIX se considera la edad de oro de la cirugía y el progreso médico. Durante este tiempo, se mejoraron las técnicas de mastectomía y las primeras radiografías sentaron las bases para los procesos de detección actuales. El descubrimiento del radio hizo posible el desarrollo de la radioterapia. Por supuesto, la humanidad aún estaba a kilómetros de comprender la forma en que se forma y se propaga el cáncer de mama, pero este fue un gran paso en la dirección correcta.  

    La década de 1900 vio aún más progreso, ya que los descubrimientos genéticos ayudaron a aislar las causas fundamentales del cáncer de mama y se descubrió que los nuevos medicamentos eran efectivos en el tratamiento. En los años ochenta, los científicos anunciaron la importancia de las medidas preventivas y la detección temprana a medida que el mundo médico avanzaba gradualmente hacia opciones de tratamiento menos invasivas y dañinas.  

    La humanidad sin duda ha recorrido un largo camino desde sus primeros enfoques para hacer frente al cáncer de mama. El tratamiento quirúrgico temprano estuvo en el límite de la barbarie, y la tasa de supervivencia entre los pacientes con cáncer de mama temprano fue baja. Sin embargo, a medida que los científicos comprenden cada vez más esta enfermedad, las opciones de tratamiento se vuelven menos invasivas y dañinas para el paciente.

    Además, los avances en la detección temprana, como los que se realizan todos los días en Koning Health , hacen que el diagnóstico sea mucho más efectivo para salvar vidas. La esperanza es que algún día vivamos en un mundo libre de cáncer, o al menos uno donde su tratamiento sea tan simple como el de un resfriado común.