Hablar con los niños sobre el cáncer de mama

Pocos niños entienden la idea del cáncer, y cuando se convierte en parte de su vida familiar, necesitan tranquilidad y apoyo. Los sentimientos de confusión y miedo son muy comunes, y su primera reacción como padre puede ser proteger a sus hijos ocultándoles información o retrasando la conversación.

Una vez que comparta la noticia, su familia podrá ayudarse mutuamente durante su diagnóstico de cáncer. Saber también le da permiso a sus hijos para reaccionar, hablar y hacer preguntas sobre su diagnóstico de cáncer. Con un buen apoyo, los niños a menudo muestran resiliencia y pueden hacer frente a una nueva realidad. Decírselo también demuestra que confía en sus hijos.

Es probable que los niños mayores hayan escuchado que las personas pueden morir de cáncer. Es natural que tengan miedo de que usted pueda morir y se pregunten qué pasará con ellos. Asegúrese de que sus hijos sepan que la mayoría de las personas con cáncer de mama mejoran y viven una vida larga y saludable. Incluso si el cáncer está avanzado, los tratamientos a menudo pueden mantenerlo bajo control durante algún tiempo. Asegúreles que, pase lo que pase, sus necesidades serán satisfechas por adultos cariñosos en sus vidas. Finalmente, no tenga miedo de decir que no sabe, ya que algunas preguntas pueden no tener respuestas inmediatas.

También puede informar a los maestros, consejeros escolares, entrenadores y otros cuidadores sobre lo que está pasando. Otros adultos de confianza que pasan tiempo con su hijo pueden ayudarlo a saber cómo está su hijo y pueden convertirse en una fuente de atención y apoyo adicionales.